jueves, 26 de mayo de 2011

El incierto panorama electoral argentino

A 146 días de los comicios en los que los argentinos elegirán Presidente, pocas certezas hay a la vista. El gobierno nacional ya oficializó por decreto que el 14 de agosto serán las elecciones internas obligatorias para quienes se presenten, y el 23 de octubre será la elección. En caso de segunda vuelta, la convocatoria sería el 20 de noviembre. Además de la fórmula presidencial, los argentinos renovarán la mitad de su cámara de Diputados, y un tercio del Senado.

Pero más allá de esta información persiste la duda más grande. Si la actual presidenta Cristina Fernández de Kirchner se postulará o no para una reelección. La incertidumbre provocó ríos de tinta el pasado fin de semana mientras los periodistas locales agotaron sus fuentes para conocer el futuro de la viuda de Néstor Kirchner. Es que la semana pasada ratificó su dubitativo discurso al aclarar: “No estoy muerta por volver a ser presidenta, muchachos. Ya di todo lo que tenía que dar, a mi no me van a correr”.

Las palabras de Cristina Kirchner se dan en el medio una puja con el sindicalismo argentino, encabezado por el poderoso líder de la Confederación General del Trabajo (CGT) Hugo Moyano, quien reclama para sus filas más poder. Durante el acto, además, la Presidenta había protestado: “Cuando a una organización sindical solamente le importa lo que les pasa a sus afiliados y toma actitudes que terminan perjudicando al conjunto de la sociedad deja de ser un sindicato para transformarse en una corporación”.

Con un posible quiebre en la alianza kirchnersimo-sindicalismo a la vista, el panorama se abre aún más con discrepancias en la oposición. Durante las últimas semanas fracasó la alianza del peronismo no kirchnerista, “peronismo federal”, que tenía como referentes al ex presidente Eduardo Duhalde y Alberto Rodríguez Saa. Tras una fallida elección primaria, Duhalde abrió camino y presentó una nueva plataforma: Unión Popular. Por su parte, Rodríguez Saa sigue en carrera, como el peronista otrora kirchnerista, Felipe Solá.

El radicalismo ya oficializó a su candidato. Ricardo Alfonsín, hijo del ex presidente Raúl Ricardo, se impuso por sobre otras candidaturas fuertes como la del vicepresidente actual Julio Cobos. La otra candidatura fija es la de Lilita Carrió, de la Coalición Cívica, que volverá a postular.

Se bajó de la carrera presidencial Mauricio Macri, jefe de gobierno porteño. En cambio, el referente del PRO postulará para renovar su mandato en la capital. De hacer una buena elección, confirmaría el peso de su partido en la formula que apoye para octubre.

En caso de no presentarse Cristina Kirchner, se abriría una ventana para candidatos hoy relegados a otros distritos, como Daniel Scioli, postulante a renovar como gobernador de Buenos Aires. Pese a que desde el kirchnerismo también se apoya a otros nombre para la provincia, Scioli renueva constantemente de manera pública su alianza con Kirchner. Y si no rompió antes como otros peces gordos como Carlos Reutemann, debería tener su recompensa.

Aunque la premura no les garantice votos, las candidaturas más seguras, hoy por hoy, son las de Alfonsín y Carrió. Ellos, como todos en la Argentina, están atentos a la decisión más importante, de la que depende cualquier otra especulación: ¿Cristina 2011?



Fuente: Cope

1 comentario:

  1. La verdad que nunca me senti tan descolocada con ninguna eleccion!

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